Cuando el fanático de los tés y profesor de yoga Iona Carter viajó a Kanazawa, Japón, se dio cuenta de que los tés de allí tenían un toque único y diferente, mucho más fresco. Y eso fue lo que le inspiró a crear TWIG, un té al estilo japonés.
¿Cómo es este té?
Los tés japoneses tienen un proceso de elaboración inspirado en el té frío, por lo que tienen un sabor más refrescante. Para prepararlo, se remojan las hojas de té durante un largo período de tiempo, lo que tiene beneficios: se produce una menor cantidad de catequinas amargas, por lo que se mantiene el sabor dulce y la textura agradable. También se extrae menos cafeína, lo que lo convierte en un té más saludable.
De esta forma, nos encontramos con un té para los más puristas, sin frutas, sin azúcar, que se nutre de la sencillez de las plantas.
Las variedades de té
TWIG tiene cuatro variedades de té:
- Bocha es un té verde tostado japonés proveniente de los tallos y ramas de la Camellia sinensis.
- Darjeeling, conocido como “el campeón de los tés”, tiene su origen en India y se cultiva de forma orgánica por los monjes budistas desde el siglo XVIII.
- Keemun es un té proveniente de China, es conocido como el “rey de los tés negros” y se cultiva únicamente en Qimen, Anhui.
- Oolong, un té parcialmente oxidado que equilibra la cantidad de té verde y negro. En esta ocasión se usa el que crece a 800 metros de altura en Hsinchu, Taiwan.
El diseño de los envases
Studio Thomas diseñó los envases de té, creando una identidad visual pura como el producto en sí. La orientación vertical y la etiqueta simplista son un guiño a los comienzos japoneses del té.
Además, el 10% de los beneficios se donan. ¿Te gustaría probar el estilo japonés de los tés de TWIG?