Hay asociaciones que no admiten dudas, como es el hecho de servir “platos de cuchara” en formato gourmet. En especial para estos tiempos calurosos, donde las leguminosas se suelen relacionar con guisos contundentes y caloríficos. Así suele ser, pero también admiten ser servidos fríos e incluso con un toque muy especial. Conoce algunas de las numerosas posibilidades que presentan.
1 – Prepara un hummus de remolacha
Si el hummus corriente ya te parece espectacular, debes probar esta receta. Una opción de paté árabe hecho de legumbres 100% vegana con la frescura de la remolacha, que se prepara en tan solo 10 minutos. Muele en el procesador: garbanzos, remolacha cocida, ajo, tahini, sal, zumo de un limón y aceite de oliva virgen.
Puedes servirlo junto a vegetales crudos trozados en juliana o con los clásicos nachos.

2 – Disfruta del fasulye piyazi
La cocina turca nos propone demenciales recetas que se preparan en muy poco tiempo. Aunque su nombre la haga parecer compleja, un fasulye piyazi es una deliciosa ensalada de judías blancas, tomates y olivas negras servidas en frío.
Para hacer la preparación solo debes cocer la judías blancas y agregarles perejil, cebolla y pimiento picados, tomate en trozos y huevos duros en cuartos. Puedes servirlo sobre un colchón de lechuga cortada en tiras, rociarle vinagre, aceite y sal, y por último, olivas negras. Afiyet olsun (buen provecho)!

3 – Un delicioso falafel
Si tienes la idea de que cocinar falafel es demasiado complicado, te vamos a demostrar lo contrario. Para preparar este plato árabe debes agregar en un procesador garbanzos bien hidratados, cebolla, ajo, perejil y comino. Con ayuda de una cuchara vamos a formar las bolitas y aplastarlas ligeramente. Por último freirlas en aceite bien caliente hasta que se doren o meterlas al horno para una opción más saludable. Se sirven calentitas y acompañadas con salsa de yogur.

4 – Conoce la sopa de maní boliviana
Si bien estamos acostumbrados a disfrutarlo como snack, lo cierto es que el maní (que sí, también es una leguminosa) es un alimento con decenas de propiedades. Para prepararla debes remojar el maní durante 10 minutos en agua caliente y molerlos en el procesador juntamente con ajo y un poco de agua. Por otro lado, hervir papas en pequeños trozos, añadir arvejas, cebolla y zanahoria picadas con sal y pimienta. Colocar la pasta de maní y dejar cocinar. Puedes agregarle algún tipo de carne roja en trozos si te apetece, ¡buen provecho!
